En Los Galayos no encontraremos las escaladas más altas pero sí las más verticales, aéreas y desafiantes, con cumbres en las que la mayoría de las veces uno no se atreve ni a estirar las rodillas. Sin duda un paraiso de la escalada clásica que todo escalador debería de visitar alguna vez en su vida.
En nuestra expedición haremos tres de las vías más emblemáticas de esta escuela: Torreón de los Galayos por la vía Sur Directa y Gran Galayo por la Vía Comicci y por el Gran Diedro.
Los inicios, hay que tenerlos presentes:
Antes de entrar en materia me gustaría mencionar alguna de las personas que, de alguna u otra forma, han hecho que esta actividad sea posible, y no solo me refiero a los compañeros con los que he estado en Galayos, sino a todas las personas con las que en algún momento he compartido cuerda y han sumado aportando su granito de sabiduria.
El equipo de Galayos ha sido increible, primero mi tío Ramón, compañero inseparable de cordada durante los tres días. Luisa y Anfran, acompañando y animando en todo momento con una sonrisa. Gustavo, el promotor de toda esta historia y maestro. Gracias.
Por otro lado acordarme de toda la gente de las vocalías de Escalada y Alpinismo del club «Al Borde«, en especial a Antonio María, que tanto me ha enseñado cuando daba mis primeros pasos en este mundo y ni tan siquiera sabía hacer un ocho o un nudo dinámico. A Chencho, que sin más, es un crack. De nuevo, gracias a todos.
Algunos datos básicos:
Cómo llegar:
Hay que llegar a Arenas de San Pedro, en Ávila, a unos 150km de Madrid. Desde Arenas cogemos la AV-P-713 dirección Guisando, donde llegaremos en 5km. Desde el pueblo seguimos la pista que nos conduce al Nogal de Barranco y que en unos 5km más nos dejará enla rotonda coronada por una cabra montesa donde aparcamos el vehículo, a esta zona se la conoce como «la plataforma».
Aproximación:
Desde aquí sale un camino empedrado que en unas tres horas nos lleva al refugio. Subiremos siempre paralelos al río Pelayo, por su margen izquierda hasta cruzarlo en el inicio de la Apretura. Desde aquí continuamos por las Zetas. Al final de estas seguiremos unos hitos hasta llegar al refugio. Todo el recorrido es fácil y muy evidente. Lo peor, la carga de las mochilas, unos 20kg por cabeza.
Acceso a las agujas:
Por lo general son accesos muy cortos, dependiendo de la aguja en cuestión, pero en todos ellos tendremos que trepar por terreno más o menos fácil. Desde el refugio en no más de 30 minutos estaremos en cualquiera de las agujas.
Material:
Al tratarse de escalada clásica el material que necesitamos es diferente al de deportiva, en resumen:
- 2 cuerdas de 60m para escalar en doble.
- 15 anillos de cinta con exprés.
- Juego de fisureros.
- Juego de friends. Por ejemplo semáforo de alien y black diamond. Cuanta mayor variedad en los tamaños mejor. Predomina la fisura pequeña.
- Canasta para asegurar y rapelar.
- Mosquetones de seguridad, HMS y cintas para reuniones.
Llegamos a Los Galayos, un choque con la realidad:
Galayos es una escuela que, sobre todo al principio, no es fácil. Pese a que revisando guías y croquis observas que el grado medio de las vías es de V+/6a, el problema se presenta en la navegación, tanto dentro de las vías como para identificar el pie de vía de las mismas. No hay chapas, las reuniones se cuentan con los dedos de una mano y en alguna ocasión podemos encontrar algún clavo, que eso si, más que para asegurar sirven para saber que vamos por el camino correcto.
La escalada en Los Galayos es vertical, predominan las fisuras, diedros y chimeneas. También se ven algunas que otras placas con cuarzos enquistados, pero estas están solo al alcance de los escaladores que hace más grado. En general es una escalada atlética y técnica, que se protege con seguros flotantes. Prácticamente todas las vías son de varios largos, la más larga está en la Aguja Negra, ronda los 300m.
Bajo mi punto de vista el nivel de graduación de las vías en Galayos se corresponde con el nivel de graduación en deportiva, por lo menos en lo que a técnica se refiere, pero hay que tener en cuenta que aquí las vias están abiertas por diversos escaladores y cada uno de ellos dará un grado u otro según su criterio, aparte de la exposición y la dificultad de protección de cada vía.
¿Qué hace que todo esto sea más complejo?
Pues sencillamente que es escalada clásica y eso exige mucho más. En deportiva empiezas a escalar, llegas a la chapa y te aseguras, sigues y a los 2 metros vuelves a tener una chapa. En la escalada clásica los seguros los colocas a tu criterio, si el paso es fácil te lo puedes saltar, si llegas a una zona complicada aseguras el paso, teniendo en cuenta que la roca es como es y no siempre tendremos la fisura o grieta perfecta para meter el seguro que queremos en el momento que queramos, ahí reside la diferencia.
También hay que tener en cuenta el grado de exposición, en escalada deportiva rara vez superaremos los 35m de vía, en escalada clásica podemos empezar un segundo o tercer largo ya a 50 u 80 metros del suelo, eso se lleva en la cabeza y nos hace ser más cautos. Todo esto hace que e Torreón de los Galayos por la vía Sur Directa sea una vía increíble.


Aproximación al Torreón de los Galayos por la vía Sur:
La aproximación a la vía es relativamente corta, desde el refugio Victory hay dos opciones, ascender por la canal «Trocha Palomo» que va hasta la «Plataforma de las flores» y ahí hacer una rápel hasta el pie de vía o bajar por la canalona principal «Apretura» hasta coger la canalona Sur del Torreon, que está entre la «Punta Maria Luisa» y la «Aguja Negra». Nosotros decidimos ir por la primera, con trepadas de IIIº o incluso IVº y un rápel de 60m. Todo ello hace que vayas entrando en temperatura. La ida la hicimos subiendo por el canalizo, la vuelta por la zona de «travesía», donde se ve un vasar, mucho más recomendable que bajar por el canalizo, donde hay pasos bastante expuestos. Galayos Torreón Vía Sur Directa.


Croquis Galayos: Torreón por la vía Sur:
Torreón de los Galayos por la vía sur directa: 140m en clásica.
Una vez acabado el rápel de 60m, desde el hombro del torreón hasta el canalizo sur, este nos deja justo en el inicio de la vía de escalada. La vía se puede hacer perfectamente montando solo tres reuniones, pero nosotros la hicimos con cuatro, que hicieron un total de cinco largos, pese a que el último es una trepada de IIIº, pero es preferible hacerlo asegurado. A continuación todos ellos detallados, ahora sí, comienza el Torreón de los Galayos por la vía Sur Directa.
Primer largo:
El primer largo y está identificado con una clavija a unos metros del suelo, se inicia con un paso dur al principio. Todavía con la mente fría y los músculos algo rígidos, se resiste un poco y hay que probar varias posturas.
La reunión del primer largo se realiza en un rellano fácilmente reconocible que se encuentra debajo de una especie de cueva / desplome. Justo al llegar teníamos la incertidumbre de si era el lugar adecuado y decidí montar una reunión con tres friends. Luego nos dimos cuenta del puente roca que hay a la izquierda (una especie de columna que parece que sujeta el techo de la cueva) y una clavija (algo oxidada) que hay también en la parte izquierda.






Segundo y tercer largo:
El segundo largo se inicia con una pequeña travesía a izquierdas para poder coger una fisura vertical que nos hará entrar en un sistema de diedro donde ganaremos altura con rapidez. La línea no tiene perdida y vamos encontrando algún clavo o cinta que no nos indica que vamos por la dirección correcta.
El tercer largo, todavía más vertical nos hace desembocar, tras varios metros de escalada, en la cara Norte del Torreón, donde haremos la trepada final.




Trepada final:
La trepada final es sencilla, en una zona con poco desnivel sobre placa tumbada. Esta sección, hasta la zona donde están las cadenas de descuelgue para el rápel, se puede hacer asegurando desde las cadenas donde se instala la reunión del largo anterior. La zona es expuesta por lo que es aconsejable asegurar el paso. En toda la vía esta reunión, junto con la de descuelgue, es la única zona equipada del Torreón de los Galayos.
Rápel y vuelta al refugio:
Una vez llegamos a la zona de descuelgue comenzamos a montar el rápel, es recomendable estar siempre asegurado a las cadenas, un mal paso o descuido puede ser desastroso. La zona es muy expuesta. El rápel se realiza con cuerdas de 60 metros por la cara Norte del Torreón, es decir, la vertiente que da al refugio. Nos deja en la plataforma de las flores, justo unos metros por encima de donde hicimos el rápel para llegar a pie de vía. Una vez aquí toca destrepar, con mucho cuidado, hasta llegar de nuevo a la canalona que nos lleva al refugio.