Normalmente la gente sale de Campo 1 sobre las 2:00am, nosotros lo hicimos a las 00:30 por dos motivos, quitarnos pelotoneras en las zonas equipadas e intentar llegar a Campo 2 del Pico Lenin dándonos el mínimo de sol posible.
Nos dejaron la cena preparada (o el desayuno según se mire) en la Yurta Principal, y ahí que nos juntamos todos. Comimos y terminamos de preparar las mochilas. Fuimos a pesarlas, solo por curiosidad, y todas estaban entre los 13/15kg, hasta que pesamos la de Chencho. 21KG. Nos llevamos las manos a la cabeza, es imposible, ya a estas alturas, hacer 1.000m de desnivel con ese peso sin desfallecer. Chencho llevaba todo el día un poco nervioso (se le notaba) y llevaba la mochila llena de «por si acaso» con cosas que realmente no hacían falta. Dos plumas en vez de uno, muchísima comida, un bote de proteína en polvo de casi 500gr… empezamos a aligerar peso y se la dejamos en 16KG, ni tan mal.
Salimos atravesando C1 hasta llegar a la lengua glaciar y en poco más de 5 minutos ya estábamos poniéndonos los crampones. Nos encordamos y pusimos en marcha. Esta primera zona no es nada técnica y prácticamente no tiene grietas. La progresión es rápida y tranquila, sin sobresaltos.
Fue justo en el primer repecho, a unos 15 minutos de las primeras cuerdas fijas cuando Chencho dijo que se daba la vuelta. Nos dijo que estaba fuera de punto y no se encontraba. Realmente no íbamos a un ritmo fuerte, pero si que considero que deberíamos de haber ido un poco más despacio. Como todavía el terreno que habíamos recorrido era seguro, los cuatro estábamos de acuerdo en que se volviera solo a C1. Chencho es un tío con experiencia y no le iba a pasar nada. Además, era solo cansancio, si llega a ser por algún síntoma de MAM o algo grave si que no lo hubiéramos dejado solo.
Ahora ya, solo los tres, seguimos por el primer repecho que nos conducía a la primera zona de cuerdas fijas. Había dos cuerdas, y como yo había estado «haciendo los deberes» sobre la ruta, ya me había informado de que la buena era la de la izquierda. La de la derecha te sacaba un poco de ruta y luego había que volver. La pendiente no era muy acentuada, pero llevar la cuerda con el «jumma» ayudaba bastante. De esta forma se salva toda la zona de seracs y mayor pendiente, que entre cuerdas fijas y algunas escaleras es muy entretenido. Ahora, no falles.
Llegamos a la zona superior del glaciar y ya era todo andar, andar y andar (y cruzar muchas grietas). Comenzaba a amanecer, se intuía, muy a lo lejos, la salida del sol. Y como es habitual a estas horas en la montaña baja la temperatura y comienza a hacer más frío. Por fin, a lo lejos, vemos C2. Tan mal situado como nos habían contado, en mitad de una ladera y expuesto.
Lo que pasa desde que entramos en el Campo 2 del Pico Lenin es surrealista, los tres empezamos a tener frío y no vemos el momento de encontrar una tienda de campaña. Me desencuerdo para ir buscando más rápido una libre y a la tercera que abro, bingo. Literalmente me tiro dentro de cabeza. En menos de 2 minutos había pasado de estar titánico a no poder ni mantenerme en pie. Me siento hasta con los crampones puestos y me meto las manos en las axilas para intentar que entren en calor. Les grito a estos que está libre y no tardan ni 30seg. en entrar con un saco. Nos sentamos los tres en círculo intentando darnos calor mutuamente.
Comienzo a encontrarme peor. Pierdo más temperatura, tengo escalofríos, me duele la cabeza y alguna náusea en el estómago. Me dan dos calambres en la pierna derecha. Jamás en mi vida he tenido calambres, y no por no haber hecho deporte. Julio y Diego empiezan a estar igual. Comenzamos a pensar que es mal de altura, pero yo sigo pensando que es deshidratación extrema. No estábamos tan mal 5 minutos antes y todo el «pelotazo» ha sido justo en el momento en el que el cuerpo se ha encontrado a salvo. Si llega a ser mal de altura posiblemente nos hubiera dado antes.
C1 está a 4.400m y C2 a 5.400m, están separados por 1.000 de desnivel que se hacen en unos 6km. Por lo general la gente tarda entre 8/10h, pues nosotros lo hemos hecho en 6h. Lo hemos dado todo cuando no tocaba. No había que apretar en esta etapa de aclimatación.
Poco a poco vamos entrando en calor, nos va volviendo el apetito. Estamos volviendo en sí pero no terminamos de estar bien. Comenzamos a valorar la opción de bajar de nuevo a C1 en vez de subir a C3 (6100m).
Por lo pronto toca pasar una noche de mierda a 5100m. Los tres en una tienda de campaña diminuta. Es la primera vez que echo de menos mi cama.
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